
Pedro Echarren
Pedro Carlos Echarren, 5 de Noviembre de 1984. Chascomús (Prov. Bs. As)
Formación Académica
“Profesorado de Filosofía” (Incompleto) Universidad Nacional de La Plata.
Experiencia Profesional
2017- Dictado de clases en la Escuela Media N°1, área Filosofía.
2010 - 2016: Comerciante
2006 – 2009: Apicultor
Informática
Conocimientos medios-altos a nivel usuario: Microsoft Word, Excel, Internet, Outlook, Corel.
Cursos y Seminarios
Seminario: “Filosofía Contemporánea”
Universidad Nacional de La Plata.
La Plata 2007.
Curso: Apícola – Municipalidad de Castelli 2014.
La acústica del barro es la ultima obra poética de Pedro Echarren.
En ella se tratan de abordar varias cuestiones relacionadas con la naturaleza mas pura; desde su connotación bíblica hasta los elementos que definen a la humanidad, la austeridad del barro podría representar la finitud de la vida al modo en la concebían los griegos; todos somos del mismo material, todos somos parte de este universo, desde una gota de agua hasta las galaxias mas lejanas y desconocidas.
Por otra parte, además, se tratan cuestiones sociales, cotidianas, donde el hombre de a pie tiene que salir cada día a ganarse su pan para sobrevivir, lo que lo lleva a vivir en una continua tensión, la pulsión de muerte.
Es una obra ardua, por momentos dificil, escrita con la propia piel y la sangre.


SINOPSIS
El recorrido por los versos de “Canto de la noche” nos lleva por diversos caminos; hay un fino análisis de cuestiones sociales, culturales; hay un intento por poner voz donde hay silencio.
A su vez, el libro contiene una especie de romanticismo permanente, que no es otra cosa que el amor a la vida, de respeto a la naturaleza, al prójimo y a todos los seres que respiran o viven sobre esta tierra.
Invita al lector a realizar un viaje interior, a redescubrirse en las metáforas y a tomar conciencia de ciertas circunstancias de adversidad y de injusticia, lo cual conlleva una fuerte denuncia social, una exégesis de las relaciones de poder que mueven al mundo, donde hay excluidos, civiles, niños y mujeres que padecen lo peor por la miseria de algunos sectores de la humanidad; sin por eso perder el encanto que produce un día soleado o un día gris y de lluvia.